El agua es indispensable para el ser humano. Es nuestra fuente de vida. Nuestro cuerpo está compuesto mayormente de agua. Para mantenerlo hidratado necesitamos tomar un mínimo de “ocho” vasos de agua al día. Años atras me parecía que era una cantidad exagerada. El tiempo y los años me han enseñado que mientras más agua tomo mi cuerpo se beneficia.
Atras quedaron los refrescos y bebidas con alto contenido de azúcar o endulsantes artificiales. Aprendí que un vaso de agua me proporciona mejores beneficios que una lata de soda/refresco. Claro, de vez en cuando me doy un gustito y tomo alguna bebida no muy saludable. La clave está en la moderación.
Cuales son algunos de los beneficios de tomar agua?
- Nos ayuda a eliminar tóxinas por medio de la orina
- Suprime el apetito y nos ayuda a bajar de peso
- Mejora el sistema digestivo, ayuda contra el estreñimiento
- Es buenísima para la estética: piel, cabello, uñas, arrugas, acné
- Es un hidratante natural
- Te dá más energía
- Beneficia los riñones, el hígado, corazón, el cerebro
Y, ¿qué pasa si no tomamos agua?
- Nos deshidratamos
- Dolor de cabeza
- Calambres
- Retenemos líquido
- La piel se arruga y mas …
Al conocer todos los beneficios que el agua nos brinda, me he propuesto tomar más de ella. Mi meta es beber 2 litros o más al día. Pero tengo que ser sincera y confesar que hay días que me aburro de ella. Es por eso que recurro a algunos truquitos caseros para agregarle un poco de sabor.
Gracias a las frutas y vegetales he podido combatir mi aburrimiento y saciar mi ansiedad. En mi nevera no puede faltar el agua de piña o perejil. Ambas, son excelentes diuréticos.
La piña, fresas, mango, sandía y otras frutas son endulsantes naturales las cuales le dan un saborcito rico al agua. Otra opción es comprar agua con sabor en el supermercado. Las hay de diferentes sabores y son muy económicas. Ojo, con la azúcar!
Mi más reciente descubrimiento es hacer cubitos de hielo de fruta. Son muy fácil de preparar. Solo tienes que licuar un pedazo de tú fruta favorita con un poquito de agua y echar la mezcla en un molde he hielo. Lo colocas en el refrigerador. Luego le agregas uno de los cubitos de fruta (ya congelados) al agua para darle sabor y listo. Si quieres ser más creativa, puedes mezclar dos o mas frutas. Mis favoritas son piña y frezas.
El agua no tiene que ser aburrida. Usa tú imaginación pero no dejes de tomarla.
